lunes, 30 de julio de 2007

Al Sur de Granada



Como el escritor de la película, Gerald Brennan, yo también necesitaba hacer una escapadita a ese lugar de encanto en plenas Alpujarras, al sur de Granada. Este fin de semana me ha dado tiempo para pensar, para darme cuenta de que lo que no he reflexionado en el Espino, podía pensarlo ahora. Así es como he sacado conclusiones que no quería sacar y que ahora en cierto modo me atormentan, pero que necesitaba sacar fuera de mí.


En plena sierra, junto al pueblo de Busquístar, en la ladera de un monte, he visto atardecer, y cuando ya no me quedaban suspiros, me he dejado aconsejar por la brisa que en la noche me acompañaba mientras veía las estrellas. Si de algo me arrepiento es de haberme ido del Espino sin compartir esas cosas para las que no he tenido tiempo con tanto ajetreo. Ahora, pues tengo una espina clavada en el alma, y un montón de ilusiones por las que voy a luchar.


También aprovecho para decirle a los granadinos que su ciudad es de las pocas que me quitan la respiración cuando paseo por ella, y cuando me quedo embobado contemplando la Alhambra, desde San Nicolás. Espero que pueda haceros una visita pronto, si no os adelantáis vosotros.

1 comentario:

Anónimo dijo...

q guay..!
yo me he tirao varios años de pequeña yendo a la alpujarra de Granada: Capileira, Bubión, Pampaneira, Trevelez (conocido por los buenos jamones..:P)...tanto en verano como en navidad, y me encantan., tienen unos paisajes preciosos!Además..es que me encantan las costumbres y las cosas propias de los pueblos y la verdad que si que son muy aptos para reflexiones..!
Besos niñoo